Breves policiales

Pidió rescate por su esposa e intentó suicidarse
Un trastornado hombre mantuvo como rehén a su esposa desde la noche del miércoles hasta la mañana de este jueves, cuando efectivos de la Policía del estado Bolívar y de la Brigada de Respuesta Inmediata del Cicpc, lo detuvieron y “rescataron” a la víctima.
Según información suministrada por efectivos de la Policía del estado Bolívar, David Rivas Cure, de 30 años de edad, sometió a su esposa en el apartamento que compartían -en la Torre 3 de Los Raudales- y después llamó a su suegra para exigirle Bs.F. 2 mil a cambio de no hacerle nada.
La madre de la retenida pidió ayuda a las autoridades y simuló que pagaría el rescate en el estacionamiento del edificio, sin embargo, a Rivas lo esperaban los policías para detenerlo.
Las cosas se salieron de control y al verse descubierto, Rivas supuestamente amenazó con degollarse utilizando un cuchillo de cocina que estaba en su casa, pero luego de dos horas se entregó a las autoridades al ver que nada podía hacer.
“El Masacre” asesinó a mendigo en Castillito
Vecinos del sector “los 7 Bares” de Castillito ratificaron las denuncias realizadas el miércoles y acusaron a “el Masacre” de acabar con la vida de Víctor Alexander Segovia Fuentes, un supuesto indigente de 41 años de edad, que fue asesinado la noche del pasado martes, en la calle El Progreso.
Aseguran que Wilmer Valdez -el supuesto asesino- le disparó a Segovia porque, después de robarle una crema de zapatos, la víctima le reclamó.
“Le pidió la pistola prestada a ‘Rey’ y a ‘el Caracas’ y lo mató, porque le reclamó algo”, dijo esta vecina, quien además agregó que “el Masacre” es quien cuida a los vendedores de drogas de este sector.
“Él también ahuyenta a los que quieren venir a tumbarles los negocios, porque también vende”, denunciaron.
Denuncian a contratista de Tocoma por agresión
Daisy Cortez, trabajadora de Mantenimiento de Tocoma para la contratista Servicios y Construcción Sur Oriental, denunció al propietario de la misma, Otto Aguilar, por presunta agresión física y verbal luego de que ella se resistiera a firmar una carta de renuncia inmediata, mientras era despedida “injustificadamente”.
Con constancias de las denuncias ante el Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) y la Policía del estado Bolívar (PEB), Cortez contó que luego de que se ordenara su despido solicitó conversar con el jefe y éste intentó obligarla a firmar “a punta de empujones y puñetazos en la cabeza”.
Considera una injusticia que “empresarios de ese tipo hacen lo que les da la gana, porque solventan sus problemas ‘bajándose de la mula’ con los organismos, mientras que explotan y humillan a los trabajadores”.
La dama, de 33 años de edad, pidió atención a las autoridades y dijo que “ya es hora de que se acabe esta situación”.